Invisible los problemas de salud mental

 

1 de cada 10 puertorriqueños sufre de algún desorden de salud mental, según un estudio realizado por el Recinto de Ciencias Médicas pos- huracán María. (Foto suministrada).

Por: Andrea P. Acevedo Rosado (andrea.acevedo4@upr.edu)

La crisis de salud mental en Puerto Rico está afectada a tal nivel que durante el fin de semana pasado, un hombre en Yabucoa subió a una torre de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) y amenazó con lanzarse al vació si el servicio de luz eléctrica no se restablecía.

La salud mental, antes y después del huracán María

Entre los años 2000 al 2016,​ en Puerto Rico se reportaron un total de 5,187 muertes a causa del suicidio, calculando así un promedio anual de 305 suicidios y convirtiéndose en la tercera causa de muerte violenta en la isla. El suicidio se trata de una recopilación de comportamientos complejos, desde la idea o el deseo de morir, pasando por el intento (amenazas) hasta concluir en el acto consumado (muerte por suicidio). Se estima que más mujeres intentan quitarse la vida, sin embargo, más hombres lo logran.

A principios del 2017, el periódico El Nuevo Día divulgó información sobre el estado de salud mental de los puertorriqueños, convirtiendo a este en el primer estudio epidemiológico divulgado en los últimos 31 años. La investigación fue realizada por el Recinto de Ciencias Médicas para la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA).

El estudio confirmó que 1 de cada 10 puertorriqueños sufre de trastornos de ansiedad y de depresión. Esto representa el 7.3% de la población, equivalente a 165,497 personas y muchas de estas personas sufren en silencio, sin el diagnóstico y sin posibilidad de recibir algún tratamiento.

A finales del 2017, la salud mental en la isla se vio gravemente afectada tras el paso de María y el caso de suicidios reportado, triplicó.

Luego de la normalización de las redes telefónicas, los registros de llamadas a la línea PAS- compuesta por profesionales que ofrecen ayuda emocional en momentos de crisis- se dispararon.  Se calcula que entre los meses de noviembre a enero del 2018, se recibieron más de 12,000 llamadas de personas con pensamientos suicidas y de personas que intentaron suicidarse.

Existen estudios científicos realizados en el 2005 después del huracán Katrina, en lo que se confirma que sí puede catalogarse como una crisis de salud mental el efecto directo en las emociones de las personas que han sido afectadas por un desastre natural de tal magnitud.

Miles de puertorriqueños perdieron sus hogares y pertenencias. Además, la falta de comunicación, vivir meses en la oscuridad, carecer de agua potable o comida, tener que buscar recursos necesarios para el funcionamiento diario, como gasolina y medicamentos, fueron factores que todos los puertorriqueños se vieron obligados a enfrentar. La situación para muchos, incluso ha cambiado muy poco a casi ocho meses del desastre.

“Todos pasamos por este evento y tuvimos que procesarlo, pero no todo ser humano procesa los eventos traumáticos de la misma manera,” enfatizó el doctor Josué A. Torres, psicólogo clínico. “Incluso, después del huracán María una de las poblaciones que se vio más afectada fue la de los envejecientes, ya que muchos se encontraban desorientados por la situación”.

Documental filmado por The New York Times dentro del centro Línea PAS: 

La salud mental a nivel global

Cada 40 segundos, una vida termina debido al suicidio. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, los casos más graves de la depresión pueden llegar al suicidio y se estima que más de 800,000 personas se quitan la vida al año.

Cuando hablamos sobre la depresión, la persona que sufre de este desorden se invade de sentimientos constantes de: tristeza, coraje, culpa o desesperación.

Luego se observan los síntomas relacionados con el comportamiento de una persona con depresión, los cuales pueden ser: falta de energía, pobre concentración, problemas para dormir, cambios en el apetito y distanciarse de sus familiares o amigos.

Por último, los pensamientos de una persona con depresión pueden incluir: pobre autoestima, perdida de interés o placer en realizar diferentes actividades y el más preocupante de todos, ideas suicidas. Para que una persona sea oficialmente diagnosticada con esta condición, los síntomas deben estar presentes durante varias semanas o meses.  En muchos casos se trata de un ciclo, que se repite a intervalos.

Las personas que sufren de depresión tratan de llevar una vida normal y pueden engañar a los demás, pretendiendo ser felices. Añadió el doctor Josué A. Torres, que “a veces los pacientes se describen como si fueran un payaso. Tienen una máscara, sonríen y son graciosos, pero por dentro tienen mucho dolor. Quizás hay trauma de la niñez o quizás hay otro tipo de dolor que está presente constantemente”.

De igual importancia, por cada persona que se suicida, cerca de 6 a 10 personas entre amistades y familiares, quedan afectadas de por vida y la mayoría experimenta sentimientos de culpabilidad.

Sin embargo, ese no fue el caso de un estudiante de la UPR, quien por razones de confidencialidad su identidad será anónima. Su mejor amigo, cometió suicidio una semana antes del huracán María y comentó que se sentía molesto, “porque esa no es la única opción…”. Añadió que, “él era un muchacho alegre, siempre estaba con nosotros y nos decíamos todo… pero habían cosas que él no quería hablar.”

¿Cómo puedo ayudar a una persona con un desorden mental como la depresión?

“Escuchar… y tomar en serio lo que dice la persona,” argumentó el doctor Josué Torres Soto, que es el mejor apoyo que puede sentir una persona con intentos suicidas. “A veces tendemos a ser más racionales que emocionales, cuando alguien nos cuenta un problema, les decimos que no se preocupen, que no lloren y que tienen que ser fuertes… cuando la persona realmente lo que está buscando es desahogarse y no reprimir esos sentimientos”.

El año pasado, Netflix lanzó ‘13 Reasons Why’, una serie que causó mucha controversia, ya que la protagonista principal, una joven llamada Hannah Baker, explica en trece cintas grabadas por qué decidió quitarse la vida. El programa acogió tantas críticas, que la revista Time publicó un estudio sobre el tema.

La investigación fue liderada por un equipo de investigadores de la Universidad de San Diego que analizaron búsquedas en internet relacionadas con el suicidio 19 días luego del estreno de esta serie. Se mostró un aumento tanto negativo como positivo. Los televidentes buscaron en línea frases como “prevención del suicidio,” respaldando así la carta de Netflix, quienes deseaban crear conciencia sobre el tema. Además, los fanáticos tomaron la iniciativa de crear diálogos entre padres, adolescentes, escuelas y defensores de la salud mental al ver los temas difíciles presentados en el programa.

Sin embargo, no se trata de una serie para todos, ya que podría provocar reacciones contrarias en una persona que sufre un trastorno de salud mental. Las escenas de la serie podrían asociarse con ser un ‘trigger’ o elemento incitador, y por eso aparecen advertencias del contenido en el inicio de cada episodio. Como resultado, los productores fueron más cautelosos con la segunda temporada y Netflix emitió un comunicado expresando simpatía y tomando medidas para ayudar a los espectadores vulnerables.

Todo problema tiene solución, si usted tiene pensamientos suicidas o conoce a alguien que esté pasando por esta situación no dude en llamar a:

Línea PAS al 1-800-981-0023 ó al 911

Andrea Acevedo
Author: Andrea AcevedoEstudiante del Departamento de Comunicación Tele-Radial de la Universidad de Puerto Rico. Área de énfasis: comunicación estratégica.

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