Grandes historias con lo desapercibido

Por: Zaelys A. Pellicier Plaza (zaelys.pellicier@upr.edu)

No escondía nada a mis lectores –(o usaba) nombres reales y hechos reales que se pudieran verificar, o no hay historia

¿Cómo se puede convertir un hecho cotidiano en la historia más fascinante jamás contada? Gay Talese, con su distintiva vestimenta de chaqueta, corbata y sombrero, y una magnífica habilidad de ilustrar de forma vívida perfiles y sucesos demuestra ser un maestro en este arte como periodista y escritor de no-ficción estadounidense.

Los comienzos

El 7 de febrero de 1932, una pareja de inmigrantes italianos trae al mundo a Gay Talese en el pueblo de Ocean City, New Jersey. El padre de Gay trabajó como sastre, mientras su madre laboró en una tienda de departamento en Brooklyn.

Durante su vida escolar, Gay sufrió marginalización por parte de sus compañeros. Era catalogado como una minoría por sus raíces italianas, y como un chico raro, presumido y que aparentaba ser mayor que los demás (por su estilo de vestir con chaqueta y corbata a la escuela).

Encontró un refugio en el periodismo en el año 1947, al ser puesto como reportero y columnista de deportes y temas generales en el periódico de su escuela. Tan hábil resultó en el área que prosiguió su carrera en la Universidad de Alabama, con una concentración en periodismo y diversos artículos de deportes publicados en el periódico de la institución.

Su carrera en medios masivos comienza en el año 1953 como un copyboy en el New York Times. Mientras se desempeñó en ese trabajo escribía artículos que impresionaban a los editores del medio,  y algunos fueron publicados sin firma. En 1954, sirve en las Fuerzas Armadas, pero mantiene comunicación con el periódico,  y en 1956 regresa para ser reportero.

Así comienza una vida que abarca periódicos, revistas, libros y ser pionero de un nuevo género periodístico.

Historias grandes en las ocurrencias pequeñas

Al mirar las historias de Gay Talese se puede observar un detalle: este escritor prefiere contar lo desapercibido que buscar la “historia del momento”. Se demuestra cuando describe para Esquire el ambiente donde el artista Frank Sinatra sufre de una congestión en “Frank Sinatra has a Cold” o cuando relata el peculiar secreto del dueño de un motel en Colorado en “The Voyeur’s Motel”.

Su estilo de redacción da mucho de qué hablar. En muchos artículos atrasa el “gancho” de su noticia (cosa que tradicionalmente nunca se realiza en el periodismo) para así jugar con descripciones y crear un ambiente literario como preámbulo.

Le rinde mucho crédito de sus destrezas de periodismo literario a su madre, en especial en los momentos que debe realizar entrevistas.

Aprendí [de mi madre]… a escuchar con paciencia y cuidado, y a nunca interrumpir incluso en los momentos donde las personas encuentran difícil explicarse a ellos mismos, porque en esas pausas y momentos imprecisos… la gente es muy reveladora- lo que dudan en decir dice mucho sobre ellos

-Origins of a Non-Fiction Writer

Para publicar sus obras recurre más a las revistas y los libros que a los periódicos tradicionales. Una vez explicó su incomodidad sobre los periódicos:

Encontré por primera vez que no tenía libertad como escritor. Los editores tenían diferentes estándares para los atletas que para líderes políticos, militares o de negocios. Las figuras deportivas no se les tomaban en serio. Si cubría la alcaldía y el alcalde se hurgaba la nariz y tomaba cerveza “lite” no podía escribir sobre eso. Por el contrario, si un boxeador se hurgaba la nariz y tomaba cerveza “lite” podía ser escrito en su totalidad

Gay Talese

Cuando publica su primer artículo en la revista “Esquire” en 1960 (titulado New York/New York) describió: “Una vez comencé a escribir para Esquire, supe que ahí era donde pertenecía”

Pionero del “New Journalism”

Un gran hito en la carrera de Talese es convertirse en pionero del “Nuevo Periodismo” en la década de 1960, junto a otros escritores como Tom Wolfe y Truman Capote.

Este movimiento consiste en integrar elementos de la ficción al momento de redactar una noticia mientras se mantienen los principios periodísticos como la verificación de datos y la objetividad.

Para la realización de estas obras se realizan investigaciones y entrevistas, pero se destaca por ser narrado por medio de diálogos, escenas, descripciones vívidas que transportan al lector al momento donde se desarrolla la información (y no solamente explica un hecho de forma breve).

Sus obras

Desde sus comienzos en 1947, Gay Talese ha publicado centenares de historias. En su período escolar escribió 311 artículos entre reportajes y columnas. Ha escrito en el periódico The New York Times y en revistas como Esquire, Newsweek, The New Yorker y Harper’s Magazine. Entre sus artículos se encuentra “Frank Sinatra has a Cold” (Esquire), “High Notes” (The New Yorker), “The New York Times” (Harper’s Magazine), entre otros.

Es autor de 15 libros. Su primer libro publicado en 1961 –New York: A Serendepiter’s Journey- cuenta sus experiencias en su primera década viviendo en Nueva York.

Algunos de sus libros más destacados son “Thy Neighbors’s Wife” (1980), el cual retrata la vida sexual de los Estados Unidos en los 80s –época cuando el sexo continuaba siendo un tabú-, “Honor Thy Father” (1971) que reseña la vida de la familia Bonnano –vinculados con la mafia-, “The Kingdom and the Power” (1969), una vista tras bastidores de la industria del New York Times, entre otros.

Su libro más reciente se titula High Notes: Selected Writings of Gay Talese, una recolección de escritos publicado en 2017.

Uno de sus libros más adaptados y polémicos se titula “The Voyeur’s Motel”, libro que cuenta la vida de Gerald Foos, dueño de un motel en Colorado que rediseñó para espiar a sus huéspedes. Desde la década de 1960, el señor Foos documentó los actos sexuales de sus clientes desde el techo de su edificio, y en sus 15 años de observaciones, nunca fue descubierto. Talese publicó en 2016 el libro y una crónica adaptada para The New Yorker y en 2017, se produjo un documental para Netflix.

Con sus diversos escritos Gay Talese nos enseña valiosas lecciones. En cualquier rincón existe una historia fascinante, solo es cuestión de saber observar nuestros alrededores. También es posible ser creativo con nuestros relatos –teniendo en cuenta los principios del periodismo y la no ficción- para convertir lo pequeño en artículos inolvidables.

Zaelys Pellicier
Author: Zaelys PellicierEstudiante de Comunicación Tele-Radial en la Universidad de Puerto Rico en Arecibo. Intereses dentro del campo: Periodismo y Producción/Dirección

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