Por: Manuel Crespo (manuel.crespo4@upr.edu)
Mientras hacía mi acostumbrado research mañanero por las distintas redes sociales, me sumergía en las noticias acontecidas y aunque apenas podía contener el sueño, me topé con esta foto. Era una de esas que que la gente comparte y (re)comparte en Facebook, pues tiene un mensaje positivo o algo interesante que decir.
En otra ocasión hubiese (en buen puertorro’) pichao’ la foto, pero hoy no era cualquier día. Hoy celebrábamos la primera serie de talleres de periodismo, fotografía y redes sociales. «Tinta para las nuevas generaciones»: un proyecto que surgió de una conversación cotidiana con mi hermano- que es estudiante de la Escuela Epifanio Estrada de Aguada – y que poco a poco fue materializándose en una realidad, gracias al compromiso y la entrega de los miembros que componen la asociación estudiantil, Tinta Digital.
Las reuniones entre tinter@s, las charlas de pasillo, las ideas para talleres compartidas de forma dispersa, conspiraron en una especie de mentalidad inhalada colectivamente que resultó en el éxito de este proyecto educativo -comunitario con los estudiantes de la Escuela S.U Epifanio Estrada, mi alma mater.
El periodismo intencionado que utilizamos como filosofía en Tinta Digital, es mucho más que escribir para un blog estudiantil. El periodismo intencionado del que constantemente hablamos toma vida propia, cual si fuera un ente vivo que nos llena de energía y logra trascender barreras de espacio, edad, sexo, creencias…y que en gran medida nos otorga la responsabilidad de devolverle al universo lo que por suerte hemos recibido.
Esto somos. Un grupo de locos románticos unidos por la pasión al periodismo, buscando cambiar el mundo (que ya de por sí anda algo loco) una charla, un texto, una palabra, una persona a la vez…