Playa caza y pesca en Arecibo antes y después
Por: Angelys Pérez Rodríguez (angelys.perez@upr.edu)
¿Dónde está aquella playa hermosa que visitaba la mayoría de las tardes, totalmente relajada con una piña colada en las manos mientras, observaba las olas del mar? De momento todo se desvaneció.
Una de las mejores playas ubicadas en el área norte de Puerto Rico y visitadas frecuentemente por turistas, está desapareciendo absolutamente por una gran erosión muy devastadora.
Una situación increíble y sumamente alarmante en la cual necesitamos tomar acción inmediata. En vez de averiguar desde tu auto y mirar lo que está sucediendo, ayúdanos a levantar la voz porque ese tiempo perdido puede ser el que necesitamos para salvar nuestras casas. ¿Se dan cuenta que el mar se traga la arena poco a poco y estamos a punto de perderlo todo?
El aumento en el nivel del mar, el cambio climático, la construcción desmedida y el incumplimiento de los reglamentos ambientales son los factores principales que han provocado la erosión en las costas. De más está decir que esto afecta seriamente la industria gastronómica, turística y las actividades deportivas que se llevan a cabo en las playas.
Si el gobernador dice que estamos preparados para cualquier fenómeno atmosférico que perjudique la isla, desde hoy le digo que es un embustero, ni tan siquiera un relleno de piedras pueden colocar en nuestras costas para controlar aunque sea un poco la descomunal erosión, por lo menos para que no afecte nuestras casas en lo que toman otras medidas preventivas que puedan ser de provecho para nosotros.
Por otro lado nuestro queridísimo alcalde Carlos Molina, cede promociones de festivales en programas de televisión y ofrece ofertas en Arasibo Steak House. Por ejemplo: si compras un almuerzo, te llevas una taquilla del próximo juego de los Capitanes. El honorable pierde el tiempo en cosas no tan importantes y no provee el apoyo a comunidades como el barrio Islote, donde la mayoría de los habitantes son de clase media y baja, ni se preocupa por la prevención de nuestras costas. Figuras como él solo sirven para llamar la atención del público y para crear distracciones e ignorar lo que realmente su pueblo necesita.
Estamos muy ansiosos y desesperados por la marejada que nos espera en noviembre, llamada la Marejada de los Muertos. ¿Qué pasara con nosotros y nuestra comunidad?
La urgencia con la que amerita se atienda este tema, nos obliga a explorar alternativas viables, revisar nuestras leyes y reglamentos o, simplemente, hacerlos cumplir. Lo que no puede estar presente es la toma de desiciones con soluciones temporales y los intereses particulares. Esto es un asunto de todos.