En la actualidad uno de los mayores retos que enfrenta Puerto Rico es el descenso en la natalidad.
La disminución significativa en el número de nacimientos vivos en la Isla, lo reflejan las estadísticas de 2000 a 2023, plantea interrogantes sobre la dinámica social, económica y política que subyace detrás de esta tendencia preocupante. Ante esta realidad, se alza una pregunta inevitable: ¿es la maternidad una opción viable en la actualidad?
Los datos hablan por sí solos: en el año 2000, se registraron 59,460 nacimientos vivos en Puerto Rico, mientras que en 2023, la cifra demostró un descenso de 17,772, representando un alarmante cambio del 70%. A lo que el secretario del Departamento de Salud, Carlos Medallo López, señaló: «Si las mujeres no quieren parir en Puerto Rico, tenemos un problema serio».
En la última década, se han cerrado más de 10 salas de parto en la isla. Sin embargo, entender por qué las mujeres optan cada vez más por no tener hijos implica adentrarse en una serie de desafíos que enfrenta la sociedad contemporánea. Factores como: escasez de centros de cuidado infantil, violencia obstétrica, violencia por feminicidios, inflación en torno al costo de vida y el acceso limitado a la vivienda juegan un papel determinante en la toma de decisiones reproductivas.
Noreliz Caban Dumeng, una joven enfermera, señaló que en el futuro aspira a ser madre pero antes de serlo desea realizar ciertas metas. Eso para ella sería “un proyecto de vida” y para realizarlo debe de contar con un hogar seguro y estabilidad económica. Sin embargo, en la actualidad ejerciendo como enfermera, se le haría imposible dedicarse a ser madre porque no le daría el tiempo correspondiente a su bebé ya que hoy día, las enfermeras trabajan turnos de doce horas o más.
Ahora bien, la preocupación de muchas mujeres se basa en el temor de ¿en quién pueden dejar a cargo a sus bebés mientras trabajan? Un estudio realizado por la Administración para el Cuidado y el Desarrollo Integral de la Niñez (Acuden), catalogó el 68% de los municipios de la Isla como “zonas desiertas”, indicativo de las faltas de estos centros alrededor del país. Se estimó que alrededor de 60,000 menores podrían estar desprovistos de este tipo de servicios.
Por otra parte, se añade la violencia obstétrica, que ocurre durante los servicios de salud a mujeres que están embarazadas. En un análisis realizado por medicina Salud Pública durante el 2016 al 2019, los resultados arrojaron que un 99% de las mujeres que participaron en el estudio; indicaron que habían tenido al menos una manifestación de violencia obstétrica durante el proceso de su embarazo, ya sea antes, durante o después del parto.
Además, las cesáreas en el año 2022 alcanzaron una cifra récord tras registrarse un 50.0% de nacimientos mediante cirugías, esto según un reciente estudio publicado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés). El informe establece que gran parte de los nacimientos locales fueron quirúrgicos, aumentando los costos y riesgos de las madres.
Por si fuera poco las mujeres día a día, luchan con los feminicidios. Desde el año 2021 el país se encuentra en un estado de emergencia por los feminicidios. Un lamentable caso que marcó a Puerto Rico fue la noticia de Keishla Rodríguez, una joven que aspiraba a ser madre. Sin embargo, su pareja el ex-boxeador Félix Verdejo no se lo permitió y le arrebató la vida. En estadísticas de septiembre de 2023 se tenían registrados diecinueve casos de feminicidios.
Otro escenario es, la inflación en torno al costo de vida, según un análisis del estudio «Radiografía del Consumidor 2023», comisionado por la Cámara de Mercadeo, Industrial y Distribución de Alimentos (MIDA), los gastos promedio de los puertorriqueños superan sus ingresos. Manuel Reyes, vicepresidente de la MIDA, explicó para el periódico el Vocero, que uno de los factores que afecta los patrones de consumo en Puerto Rico es que los ciudadanos están gastando más de lo que ingresan.
Adicional se encuentra, el acceso limitado a la vivienda, lo cual es una preocupación para muchas mujeres: ¿dónde viviré con mi bebé? En los últimos años, los precios han aumentado a niveles exorbitantes y poco accesibles. En la actualidad, para establecer un hogar desde cero, el rango promedio es de $300,000, según lo expuesto por el presidente de la Asociación de Constructores de Puerto Rico (ACPR), Agustín Rojo. Por el contrario, el costo de un apartamento ronda entre $900 y $1,000. Estos datos revelan lo costoso y complicado que resulta obtener una vivienda segura en la actualidad.
En última instancia, la viabilidad de la maternidad no debería depender únicamente de las circunstancias individuales de cada mujer, sino de un sistema que garantice igualdad de oportunidades, apoyo integral y condiciones dignas para la crianza y el desarrollo de las futuras generaciones. Es hora de replantear nuestro enfoque hacia la maternidad y construir un futuro donde ser madre sea una opción genuinamente viable y empoderadora.