Por: Lismarie Cuevas, estudiante del Departamento de Comunicación Tele-Radial, UPRA
La Universidad trasciende mucho más allá del aula. El aspecto académico también involucra muchas otras áreas que se cultivan dentro del alma mater. Una de ellas es la expresión artística, aquella que sensibiliza el alma y se nutre de la naturaleza que compartimos como seres humanos.
Es por ello que la Universidad de Puerto Rico en Arecibo (UPRA) cuenta con varias agrupaciones que permiten que aflore este sentido artístico que vive dentro de los estudiantes. Dos de estas son la Banda de Conciertos y la Tuna, ambas dirigidas actualmente por el profesor Ángel Bonet.
El profesor Bonet inició su labor docente en agosto del 2009, sin embargo, cuenta con una trayectoria de 18 años en el Departamento de Educación. En conversación con el profesor, Bonet contó su experiencia como director de estos conjuntos, tan diferentes entre sí. Por una parte, en la Banda, el nivel de dificultad depende del arreglo y cada sección contiene partes que son importantes tocar apropiadamente. La Tuna, por otro lado, debe aprender sus canciones dependiendo del oído de cada integrante, quien a su vez ayuda a otros compañeros a interpretar la canción de la mejor manera posible.
Ambos conjuntos han representado por largos años a nuestra Universidad. La Tuna ha viajado fuera del país en numerosas ocasiones, así llevando el nombre de UPRA en alto.
En retrospectiva, el profesor Bonet recuerda cuando mucho antes de ser director de la banda, era un estudiante y músico, miembro de la misma banda que ahora dirige.
Recorrían los años 90 cuando Ángel Bonet era estudiante del recinto de Arecibo y formaba parte de la Banda de Conciertos de la Universidad. La misma era dirigida por Pablo Vargas, un director estricto, riguroso y dedicado, quien en muchas ocasiones hacía los arreglos que tocaban. Bonet recuerda que, al contrario de ahora, la Banda y la Tuna tenían su propio salón y los ensayos se llevaban a cabo en el Centro de Estudiantes.
“(Antes) existía el mismo bullicio y reguero que caracteriza a los músicos, pero cuando era hora de tocar, era a tocar”, expresó Bonet, recordando cómo eran los ensayos.
Cuenta que la banda ha progresado con el pasar de los años, pero igual que hoy día, en aquellos tiempos reinaba la misma dedicación y pasión por la música. Dicha euforia y disciplina que distingue a estos jóvenes músicos es algo que ha perdurado en la trayectoria de la Banda.
Como expresa el mismo profesor, las artes humanizan al estudiante y aportan el tacto necesario para ser una persona más completa.
La Tuna de la Universidad tuvo sus comienzos para julio del 1998, pero a pesar de haber comenzado no hace mucho, ya ha ganado distinción por sus méritos. El conjunto musical ha llevado el nombre de nuestro recinto hasta España y Portugal, donde para el 2008 fueron los ganadores de numerosos galardones tales como Tuna más Tuna, Tuna del Público, Mejor Baile de Pandereta, entre otros más. La experiencia fue una gratificante para todos los miembros quienes trascendieron fronteras con su ritmo.
Al día de hoy la importancia de estas expresiones artísticas en la vida universitaria sigue siendo imprescindible. El profesor Bonet nos recuerda que es importante destacarse más allá de las ciencias y las matemáticas, y sensibilizarnos como personas a través de las artes. Recalca que en la vida uno carga con muchas responsabilidades y pertenecer a estos conjuntos nos prepara para esa lucha diaria que viviremos cuando seamos futuros profesionales.
Para la gran mayoría de estudiantes, pertenecer a estos conjuntos es motivo de orgullo durante su vida universitaria en la que además de obtener una preparación académica, también forman parte de un grupo que les permite trascender horizontes fuera del aula.
Historia del Coro
En sus comienzos en 1979, el Coro estaba adscrito al Departamento de Educación y luego se trasladó al Departamento de Humanidades. La iniciativa estuvo en manos de la profesora Raquel Crespo, quien tras su retiro de la Universidad, fue sucedida por el profesor Jorge Muñiz Montes de Oca.
Luego de la dirección del profesor Muñiz, comienza sus funciones Joamel González Soto en 2011, quien ha contribuido a la más nueva transformación departamental, gracias a su educación musical con énfasis en dirección de coros de la UPR de Río Piedras.
El profesor completó en 2010 una Maestría en Educación Musical con énfasis en Educación Musical en el Conservatorio de Música de Puerto Rico y una especialidad en dirección de coros de la Universidad de California en Los Ángeles. Es ahí cuando logra ingresar como docente a la Universidad de Puerto Rico en Arecibo.
Principales objetivos
Entre los objetivos del actual director está el poder cumplir con su interés principal de crear un grado formal de Bachillerato en Música con énfasis en música coral dentro del Departamento. Desde su llegada, otra de sus metas era crear un coro de voces oscuras, lo que cinco años más tarde (en el 2015) se cristalizó en la fundación del primer Coro de Varones del sistema UPR.