“Un ejercicio de cobardía que me permite decir en este espacio lo que me está vedando en mi accionar cívico”. Así describe su blog la cubana Yoani Sánchez en su libro Cuba Libre: Vivir y escribir en La Habana.
Por: Marié E. Rivera Diaz (marie.rivera3@upr.edu)
¿Qué haces cuando intentan censúrarte? Buscas todas las vías para expresarte. Tal es el caso de Yoani María Sánchez Cordero, una bloguera que en la tecnología ha encontrado la llave para abrir las puertas a la cláusula de sus ideales. La internet es su única via para la libertad de expresión. La cubana describe su blog como un espacio personal, para decir en la red todo aquello que no puede a expresar en la vida real.
“Yoani”, un nombre único. Esto se debe a su generación. Como lo llama ella «la generación Y». Sánchez expresa en su libro que “se utiliza la penúltima letra del abecedario para nombrar a quienes llegaron a la pubertad cuando ya se había caído el muro de Berlín”. La filóloga llegó al mundo el 4 de septiembre de 1975, en un tiempo de salidas ilegales y de frustración. Una década en la Cuba de supervisión estricta. ¿La única libertad de esa época? El acto de nombrar a los hijos.
De una manera muy peculiar la cubana usa la intertextualidad en sus escritos: para dejar saber cómo es su día a día allá en La Habana. Muestra al mundo la realidad de la vida en el país que actualmente es liderado por Raúl Castro.
La mujer que posee una especialización en literatura latinoamericana contemporánea, emigró a Suiza en 2002. Luego de presentar problemas económicos volvió a Cuba en verano de 2004. En una entrevista con Jaime Bayly, Yoani explicó como tuvo que deshacerse de su información y credenciales para volver a Cuba luego de perder los derechos de su patria. La emigración a Suiza la describe como «vivir en Cuba en la distancia».
La ganadora del premio de Periodismo Ortega y Gasset se autodefine como una mezcla rara de hacker y lingüística. Esto debido a el camino dificultoso que ha tenido que recorrer para poder publicar sus escritos. Desde hacerse pasar por turista para poder usar internet de hoteles, hasta crear su propia computadora para poder redactar. Yoani trasforma el periodismo en Cuba. En sus escritos destapa las vendas que colocan los pocos medios de comunicación existentes en La Habana. En su libro “Cuba Libre: Vivir y escribir en la Habana», Sánchez indica que en la pantalla chica (refiriéndose a la tv) les muestran a los cubanos cómo deben creer que son y no cómo realmente son.
Yoani Sánchez dice: “Las paredes de mi vida se hacen trasparentes”, en alusión a su bitácora. Su blog es una puerta a las realidades de la vida cotidiana en Cuba. A la hora de escribir Yoani busca un sinónimo de cada palabra, extiende su vocabulario y el conocimiento de cada lector. Afirma que no hay temas complicados, ni pequeños, solo se acercan a las realidades de Cuba.
La conyugue de Reinaldo Escobar, ex-periodista del periódico cubano Juventud Rebelde, aclara que en Cuba son necesarios ciertos cambios políticos y económicos para que sus ciudadanos puedan disfrutar de mayor bienestar y alcanzar la realización personal.
GeneraciónY/14ymedio
En abril de 2007, la cubana decidió crear un blog llamado Generación Y. Este es un espacio dónde hace una descripción crítica de Cuba. La bitácora se ha traducido a diecisiete idiomas por un equipo de voluntarios. Actualiza su blog todas las semanas gracias a amigos fuera de Cuba que le dan una mano para seguir llevando sus historias alrededor del mundo. Yoani Sánchez lanzó una página web 14ymedio, un periódico digital anticomunista, dónde se incluye su blog Generación Y.
¿Qué hago yo ahí?
Esa fue la retórica que llegó a la mente de la bloguera cubana cuando descubrió que estaba entre las 100 personas más influyentes de la revista Times en el 2008. La mujer que cataloga su escritura como difícil de clasificar en algún orden, expresa que no necesitó subirse a un escenario ni tener carisma ante las cámaras, solo se dedicó a contar su realidad.
Enlaces relacionados:
Jaime Bayly entrevista aYoani Sánchez
Cuba Libre: Vivir y escribir en la Habana
