Por: Rachel Colón Sáez (rachel.colon@upr.edu)
Ha llegado el gran día para los enamorados y el peor para quien no tiene una historia de amor que compartir. Hoy todo es negro o blanco. No hay espacio para los grises. Sin embargo, para los comerciantes es totalmente colorido.
Me alegra avisar que mañana todo acabará. Sí, terminará la persecución que hemos tenido desde el día después de los reyes magos en enero. La comercialización que ha abrazado el Día de San Valentín desde el siglo XX, no nos da espacio para un suspiro luego de los gastos de navidad cuando ya te colocan los peluches en la entrada de las tiendas para acordarte la fecha que se aproxima.
El Día de los Enamorados es una buena fecha para las cursilerías, pero también es una fecha ideal para los comerciantes. En esta temporada se convierten en lobos disfrazados de ovejas tras su presa.
Lo triste del caso no es solo no tener pareja para el 14 de febrero sino todos los emails que se reciben de ofertas para dos en restaurantes con copa de vino incluida, la gama de memes en las redes sociales, películas como Fifty Shades of Grey, peluches, cartas de amor y artículos sexuales en la entrada de todas las tiendas. Tener que ver todo este tipo de cosas cada vez que visitas una tienda provoca un efecto positivo o te dan ganas de vomitar dependiendo de lo blanco o negro que sea tu día.
Esta comercialización conlleva a que algunas personas que para esta fecha no tienen pareja, entren en un estado de estrés. Toda esta publicidad que nos ahoga crea un efecto negativo a este grupo de personas. Es inaceptable el daño emocional que puede ocasionar la publicidad expuesta en este mes y como nosotros la apoyamos o dejamos que nos afecte. La realidad es que una celebración que incita al amor no debe limitarse al sentimiento entre parejas sino expandirse a la celebración del amor en la familia que tanto hace falta en nuestros días.
Otro aspecto a destacar de este tipo de anuncios para San Valentín es que quien los crea utiliza personas con un aspecto físico prometedor. Este asunto es uno que crea una visión errónea de la realidad. El objetivo de la publicidad es vender un producto o servicio y utilizan estas imágenes para atraer al consumidor, lo cual me parece despreciable, ya que afecta la percepción de la sociedad al crear estos estereotipos.
A este circo se suma la industria cinematográfica, que para esta fecha siempre estrena películas relacionadas a historias perfectas con mujeres y hombres en una vida ideal. Este tipo de narraciones hacen crear escenarios no reales donde nosotros como espectadores desearíamos estar en los lugares de cada personaje interpretado. Tal es el caso de la reciente producción Fifty Shades of Freed, donde Ana y Christian Grey son una pareja perfecta en un estrato social alto. Estos personajes se dan una vida llena de lujos y ni hablar de su apariencia física la cual es la envidia de todos. Otros ejemplos de estas películas estrenadas en febrero son: Friends with Benefits (2011), Endless Love (2014), Fifty Shades of Grey (2015, 2016, 2018), entre muchas otras.
Nosotros como consumidores debemos estar conscientes de la función que ejerce cada uno de los anuncios, películas y artículos que nos persiguen y debemos comenzar a celebrar el amor junto a algún miembro de tu familia además de con tu pareja. Y lo mas importante es no solo expresar amor uno de 365 días del año.
¡Feliz año del amor!
